Generalmente, la migraña se inicia de manera episódica, es decir, con menos de 15 días de migraña al mes. Sin embargo, en algunos casos, puede evolucionar hacia una forma crónica, lo que se traduce en experimentar 15 o más días de migraña al mes. Tras realizar varios estudios, se han identificado diversos factores que están asociados con esta evolución de migraña episódica a migraña crónica, entre ellos la hipertensión.
Una nueva revisión, publicada en la revista The Journal of Headache and Pain, ha establecido una relacionado entre la hipertensión y la cronicidad de la migraña. Esta relación se fundamenta en pruebas científicas respaldadas por una exhaustiva búsqueda bibliográfica que abordó estudios sobre el papel de la hipertensión en la evolución hacia la migraña crónica, los posibles mecanismos biológicos que respaldan la asociación entre la hipertensión y la cronicidad de la migraña, así como el impacto de los medicamentos antihipertensivos en la prevención de la migraña.
En esta nueva revisión se ha confirmado una conexión directa entre la hipertensión y el aumento en la frecuencia de los ataques de migraña. Los estudios clínicos analizados, respaldan esta afirmación al mencionar la disfunción endotelial, las alteraciones de la barrera hematoencefálica, la señalización del péptido relacionado con el gen de la calcitonina y la desregulación del sistema renina-angiotensina-aldosterona como factores que contribuyen al empeoramiento del impacto de la hipertensión sobre la frecuencia de los ataques de migraña.
Además, esta conexión se destaca aún más con la evidencia que sugiere una mayor prevalencia de hipertensión en pacientes con migraña crónica en comparación con aquellos que experimentan migraña episódica.
En conclusión, la asociación entre la hipertensión y la frecuencia de crisis de migraña refuerza la idea de que la hipertensión puede influir en la cronicidad de la migraña. Estos resultados abren nuevas líneas de estudio, ya que se está empezando a investigar la posibilidad de que medicamentos para la hipertensión puedan servir también como tratamiento para reducir la frecuencia de los ataques de migraña.
FUENTES:
- Mazzacane, F., Ramusino, M., Perini, G., Costa, A. (2024, 5 febrero). Arterial hypertension in the chronic evolution of migraine: bystander or risk factor? An overview. The Journal Of Headache And Pain. https://thejournalofheadacheandpain.biomedcentral.com/articles/10.1186/s10194-024-01720-7