Sales de la consulta con tu médico y sientes que no ha sido como esperabas. Te has olvidado de la mayoría de las cosas que querías preguntarle, pero es que además tu neurólogo tampoco te ha facilitado el camino, porque iba con prisas.
Esta situación es bastante frecuente entre los pacientes, por eso hemos preparado este artículo para darte algunos consejos prácticos que te ayuden a construir una relación de confianza y comunicación con tu neurólogo.
Cuando convives con migraña u otro tipo de cefalea primaria, contar con el apoyo de un neurólogo/a puede ser fundamental. A veces, como no se tiene contacto frecuente con este especialista, puede ser difícil establecer una buena conexión desde el principio. Sin embargo, una buena relación médico-paciente puede marcar la diferencia en la evolución del tratamiento y en la calidad de vida del paciente. Por eso, a continuación, compartimos algunos consejos prácticos que pueden ayudarte a fortalecer ese vínculo y sacar el máximo provecho de cada consulta.
- Confía en tu intuición
Cuando visites por primera vez a un neurólogo/a, fíjate en cómo te sientes durante la conversación. ¿Te escucha con atención? ¿Respeta tus opiniones y experiencias? Estas sensaciones son importantes. No se trata solo de conocimientos médicos, sentirte comprendido puede influir mucho en tu tratamiento y seguimiento. Trata de conectar o hacerle saber con sensibilidad que te gustaría que te respetase en tus opiniones.
- Llega preparada/o a la consulta
Para aprovechar al máximo el tiempo, es útil llevar una lista con tus tres preguntas principales o los síntomas que más te preocupan. También puedes anotar cuántos días has tenido migraña, si estas tomando algún tratamiento y cómo te está funcionando. Toda esta información ayudará a tu neurólogo/a a tener una visión clara y tomar mejores decisiones. Desde AEMICE te ayudamos a preparar tu visita con nuestro Diario de Migraña, haz CLIC AQUÍ para descargar la plantilla.
- La comunicación es una vía de doble sentido
Una buena relación médico-paciente se basa en el respeto mutuo y en hablar con claridad. Si sientes que no se están abordando tus dudas, no tengas miedo de expresarlo. Puedes decirlo con respeto, pero con firmeza. Recuerda que tienes derecho a entender tu situación y participar activamente en las decisiones sobre tu salud.
- Sé parte activa del plan de tratamiento
Compartir tus preferencias personales también es importante. Puede que hayas leído sobre un nuevo tratamiento o estés interesado en probar un enfoque distinto. Coméntalo con tu neurólogo/a. Estás en todo tu derecho de proponer ideas, preguntar y tomar decisiones informadas junto a tu especialista. Este consejo es especialmente importante cuando un tratamiento no nos funciona, no cumple con nuestras expectativas o sus efectos adversos impactan significativamente en nuestra vida.
- Mantén expectativas realistas y prioriza
No todas las consultas tienen la misma duración, y a veces no da tiempo a tratarlo todo. Prioriza los temas más urgentes para asegurarte de que se abordan. Lo ideal es que, poco a poco, la comunicación se vuelva más ágil y enfocada.
- Recuerda que tú también tienes un rol importante en este proceso
Buscar el mejor tratamiento para ti requiere colaboración, honestidad y confianza mutua. Elegir bien a tu neurólogo/a, compartir con claridad tus síntomas y necesidades, y mantener una comunicación abierta puede ayudarte a sentirte más acompañado/a y tomar el control de tu salud. Establecer este tipo de relación no solo mejora la experiencia médica, sino que también puede marcar una gran diferencia en tu día a día.
FUENTE:
- American Migraine Foundation. (2025, 11 febrero). How to Establish a Good Relationship with Your Doctor When Managing Migraine. https://americanmigrainefoundation.org/resource-library/how-to-establish-doctor-relations/