Rasgos de personalidad y patrones afectivos en las personas con migraña

por | Nov 29, 2024 | Estilo y Calidad de Vida

La migraña es una enfermedad que va más allá del dolor físico característico de sus ataques, dejando una profunda huella en el bienestar emocional y psicológico de quienes la padecen. Además de los episodios recurrentes de dolor agudo, la migraña se asocia con trastornos como la ansiedad, la depresión y el estrés, lo que complica aún más la vida de los pacientes. Sin embargo, de aquí surge una pregunta fundamental: ¿existen rasgos de personalidad o patrones afectivos especiales en las personas con migraña?

En la LXXVI Reunión Anual de la Sociedad Española de Neurología, celebrada del 19 al 24 de noviembre en Valencia, se han publicado dos comunicaciones que nos permiten dar respuesta a la pregunta que nos planteamos. La primera de las comunicaciones se centró en evaluar las diferencias entre las personas con migraña y un grupo control con respecto a los patrones afectivos y rasgos de personalidad.

Participaron 93 pacientes (63 pacientes y 30 controles), 84% mujeres, una edad media de 40 años y una mediana de 8 días de migraña/mes. Se incluyeron controles emparejados por edad y sexo. Se pasaron escalas de estrés postraumático (CAPS), ansiedad (BAI) y estado-rasgo de ansiedad (STAI) para evaluar trastornos del ámbito psicosocial.

Los resultados obtenidos evidenciaron que los pacientes con migraña tienen mayor tendencia a presentar ansiedad y distorsiones perceptuales, además de una mayor intolerancia a la incertidumbre. Estos resultados plantearon la siguiente pregunta a los investigadores: ¿estos rasgos de personalidad y patrones afectivos de los pacientes influyen en la respuesta al tratamiento de su migraña?

Ante esta pregunta, los investigadores se plantearon evaluar la relación entre diferentes síntomas afectivos y rasgos de personalidad de los pacientes con migraña y la respuesta objetiva y subjetiva al tratamiento preventivo de esta enfermedad con anticuerpos monoclonales anti-CGRP.

En el estudio participaron 63 pacientes con migraña, 84% mujeres, analizándose las diferencias de los resultados en las escalas de personalidad, de depresión y ansiedad y cuestionarios de calidad de vida (generales y específicos para la migraña), al inicio y a los 6 meses de tratamiento.

Para evaluar la respuesta al tratamiento, se consideraba que los pacientes respondían al tratamiento antiCGRP cuando se producía una reducción de más del 50% de días de cefalea/mes (respuesta objetiva) y/o una reducción de 2 puntos en la escala de Impresión Global de Gravedad del Paciente -PGI (respuesta subjetiva del propio paciente en una escala de 6 puntos).

El 54,1% de los pacientes respondieron de forma objetiva al tratamiento y el 46,03% de forma subjetiva. Tras el tratamiento se objetivaron cambios significativos en las escalas de síntomas psiquiátricos y en la disminución de la impulsividad. Los que tuvieron una respuesta tanto objetiva como subjetiva obtuvieron una menor puntuación en la escala EPQR-neuroticismo, respecto a aquellos que no obtuvieron respuesta. En conclusión, los pacientes con migraña que presentaron una puntuación mayor en rasgos de personalidad como el neuroticismo, y de ansiedad o depresión mostraron una peor respuesta al tratamiento con antiCGRP.

En definitiva, el estudio concluyó que los rasgos de personalidad y los patrones afectivos de las personas con migraña pueden condicionar la percepción de éstos a la respuesta de un tratamiento por su tendencia a percibir las emociones negativas con mayor gravedad y su mayor dificultad para gestionar los problemas.

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